La Vida es Goce

Al entrar en Tauro el titular del día dice

-La Tierra ríe porque la vida es GOCE-

Se trata de usar las informaciones con las que hoy gracias a los estudiosos del mundo celeste contamos; de captar la energía acorde a este tiempo para prosperar, para dar mejor forma a nuestras acciones durante este mes.

El Sol llegó a Tauro el 19 de abril, un poquito antes de lo habitual. La energía de Aries no desaparece, se transforma.

Tauro es el segundo signo del zodiaco. Corresponde al elemento Tierra, es decir al "mundo material". La tierra implica la noción de un movimiento que nos lleva hacia abajo, hacía una interioridad, hay en ella algo que podemos tocar, escarbar, agarrar, oler, moldear.

La tierra sostiene, provee, contiene en su interior las semillas, la substancia base, el alimento que es la fuente de energía. Nos apropiamos de la tierra para crecer y para eso es esencial FIJAR.

El deseo que nació con Aries en el inicio del año debe arraigarse para poder ser. Para lograrlo es necesario disminuir la velocidad de nuestros pasos, observar con qué recursos contamos, ahorrar lo necesario para promover "estabilidad" y "seguridad".

El aprendizaje del uso de la energía taurina que todos llevamos dentro, consiste en a veces aceptar el tiempo de detener la marcha. Aprender la “espera”, desarrollar la paciencia, resistir. Sostener y no rendirnos cuando aún no vemos la forma completa. En el tiempo en que la semilla se nutre bajo tierra y el brote aun no asoma, no aparecen los resultados de aquella fuerza ligada a nuestro deseo inicial, el que nos empujó a actuar.

La tierra es fértil cuando contiene agua, es decir cuando contiene "emociones". "Ama tu Masa" y será rico tu alimento. Es en la quietud que podemos darnos el tiempo para amasar, dar forma, percibir nuestro corazón y nuestra necesidad de construir algo en nuestra vida.

Este mes es el tiempo que nos propone aprender que nos volvemos más fuertes cuando logramos aumentar nuestra capacidad de "resistencia", de espera activa que nos acerca a la concreción de nuestros deseos.